En el ciclo 2006 – 2007 el turno de ser la Capital Mundial del Libro de la UNESCO le corresponde por primera vez a dos ciudades simultáneamente: Turín y Roma, con una nutrida historia literaria que se verá fortalecida, además de renovar los lazos entre los italianos con la literatura.
Turín, la ciudad donde Friederich Nietzsche, perdió la cordura, el hogar de algunas de las obras mas importantes de Leonardo Da Vinci, el lugar del que se enamoró Jean – Jaques Rousseau y la casa de Edmundo de Amicis, Cesare Pavese y Emilio Salgari, se une culturalmente con Roma, la Ciudad Eterna, la cuna del imperio mas grande y fastuoso del mundo, ciudad romántica y literaria, aquella hacia donde conducen todos los caminos. Ambas tendrán la enorme responsabilidad y el privilegio de honrar al instrumento más noble de la humanidad.
La intelectualidad europea se ha dado cita en Turín y Roma como lo hicieren durante el Imperio Romano, para transformar a la famosa capital del Piedemonte italiano en un gran escenario de ideas, debates, teatro, música y todo lo demás con lo que se pueda estimular el imaginario literario europeo, además de usar el perfil (y elemento unificador) de Sign Language, o el lenguaje de los signos, que permite nuevas formas de lectura y expresión a través de los signos de puntuación, incluso, los 10 distritos de esta ciudad los adoptarán: el punto, la coma, los signos de interrogación y exclamación, la @, los puntos suspensivos, entre otros, serán escogidos por los distritos de acuerdo a su historia e identidad. Todo este gran festival es organizado por la Alcaldía de Turín y la Fondazione per il Libro, la música e la Cultura.
Por su parte, la Ciudad Eterna y su alcaldía reciben a sus visitantes con su famoso intercambio de libros en la Basílica de Massenzio y con exhibiciones, encuentros y recitales de las obras escritas por los más famosos italianos como Italo Calvino, Elsa Morante, Giorgio Caproni, Sibila Aleramo, Mario Soldati y Dino Buzzati.
Por su parte, será inaugurada la Librería Europea que promoverá las culturas y lenguajes del viejo continente y contribuirá a fomentar la identidad italiana en sus habitantes. En toda la ciudad se realizarán las ferias del libro mas variopintas y para todos los gustos: libros antiguos, de editoriales pequeñas, de intercambio, de nuevos y usados, en fin, el libro es el protagonista y dueño de Roma.
Pero esta capital no solo festeja los libros, sino a sus escritores y a sus lectores, los que llenan de cultura el mundo, por eso, el premio Biblioteche di Roma, el premio Amelia Rosselli, para el mejor trabajo femenino, y el Sandro Onofri, para el reportaje narrativo.
Por otro lado, Turín, tendrá el honor de realizar la fiesta inaugural, además de impulsar iniciativas tales como Bookcumprà, que busca en volver en la cuidad a las comunidades de inmigrantes, el salón virtual del Atrium. Todos estos eventos serán llevados también a los niños y los colegios; los aniversarios de escritores como Primo Levi, Giuseppe Giacosa, Lalla Romano y muchos otros turineses de renombre también están proyectados dentro de la programación.
El mundo será el que disfrute, el gran beneficiado de esta fiesta de la cultura en Italia, los doce meses desde abril de 2006 al de 2007 serán para la culturización de la humanidad, que esperamos, continúe de manera exitosa cuando el turno le sea cedido a Bogotá.